Al igual que en otras entidades, a los productores del Estado de México les afectó los altos costos de insumos y servicios, así como los factores climáticos, según los resultados oportunos del Censo Agropecuario 2022 dado a conocer por el Instituto Instituto Nacional de Geografía y Estadística. La entidad se ubica en el décimo sexto lugar en superficie de uso agrícola a nivel nacional.
El censo indica que los altos costos de insumos y servicios representan el 91. 47 por ciento de los principales problemas de las unidades de producción agropecuaria en la entidad, y le siguen los factores climáticos con el 80.61 por ciento.
Mientras que la baja de precios o disminución de ventas a causa de la pandemia del COVID-19, representa el 40.77 por ciento; pérdida de infertilidad del suelo el 30.78 por ciento, la inseguridad el 34.11 por ciento y los factores biológicos el 33. 87 por ciento.
La superficie total del Estado de México es de 2 millones 235 mil 180 hectáreas, de las cuales un millón 936 mil 665 mil hectáreas son área rural y 297 mil 907 corresponden al resto de la superficie (centro de población, caminos y cuerpos de agua entre otros rasgos geográficos).
A su vez, del total de hectáreas en área rural, un millón 110 mil 861 corresponden a suelo con uso o vocación agropecuaria y 825 mil 804 a superficie sin uso o vocación agropecuaria.
En 2022, el campo mexiquense contó con 440 mil 531 unidades de producción agropecuaria y 759 mil 963 hectáreas de superficie agrícola.
Las unidades de producción agropecuaria activas son 371 mil 802, mientras que 68 mil 739 se encuentran en descanso. El censo apunta, que durante 2022, en la entidad las unidades de producción aumentaron en relación a 2007 – último año en que se tenía como referencia el Censo Agropecuario- al pasar de 345 mil 299 a 371 mil 802.
Mano de obra en el campo mexiquense
Entre los propietarios de las unidades de producción, se apunta que el 71.8 por ciento tenía una superficie de hasta cinco hectáreas, mientras que el 28.2 por ciento tiene una superficie mayor. La mano de obra en actividades agropecuarias en estas unidades fue de 2 millones 728 mil 382 personas.
En 2022 se percibió un descenso de dos puntos porcentuales en la participación de la mujer en el campo, frente al censo del 2007. Las unidades siguen siendo trabajadas principalmente por hombres, quienes representan el 68.1 por ciento, es decir, un millón 858 mil 811 de los trabajadores del campo. En tanto, las mujeres representan el 31.9 por ciento, es decir 869 mil 571.
La mano de obra se compone de la siguiente manera:
Familiares: 970 mil 860
Personas dependientes de las unidades de producción: 129 mil 960
Productores que participan activamente en las labores productivas: 282 mil 880
Jornaleros: 1 millón 344 mil 682
El 47. 2 por ciento de las personas que laboran en campo tiene más de 45 años, mientras que el 30.9 por ciento tiene 65 o más años. Por último, la escolaridad que predomina en la mano de obra es la primaria (50.6 por ciento), sin embargo, los niveles de secundaria aumentaron en un 24.1 por ciento y los de preparatoria un 5.9 por ciento.