En el Estado de México, existe una pauta de impunidad sistemática derivada del bajo nivel de calidad de los servicios públicos relacionados con el acceso a la justicia y su gestión administrativa ligadas a la violencia contra las mujeres y niñas, que producen la insuficiente investigación, sanción y reparación efectiva, que se recrudeció con la pandemia por Covid-19, señaló Gadiel Alcaraz Gil, abogado de víctimas.
En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, destacó que un derecho fundamental es garantizar el acceso a la justicia a las mujeres en condiciones de igualdad, para que puedan alcanzar una vida libre de violencia.
Algunas de las fallas estructurales del sistema de justicia mexiquense son de antaño, dijo, y en este tiempo, contribuyeron a reducir aún más la forma de protección y justicia para las víctimas de violencia de género, quienes además son revictimizadas y estigmatizadas.
A pesar de que se habla de la capacitación a los agentes del Ministerio Público, éstos siguen empleando frases como: eso le pasa por andar vestida así, por andar a altas horas de la noche, por ir al baile; entre otras expresiones estereotipadas más”.
En tales casos, indicó el abogado asesor de víctimas, es urgente que, en todo el sistema de justicia, en los Ministerios Públicos y en los Centros de Justicia para las Mujeres existan medidas efectivas que prevengan estas conductas y para sancionar a los funcionarios públicos, que vulneren los derechos de las mujeres durante el proceso.
Otra de las deficiencias en la administración de justicia, abundó, es el incumplimiento de la obligación de la debida diligencia, que deriva en la ineficacia e impunidad ante el tratamiento de los casos, lo cual contribuye y obstaculiza aún más el derecho de las mujeres a vivir una vida libre de violencia y su derecho de acceso a la justicia como lo establece la Convención de Belém do Pará.
Lo grave, recalcó, es que ante la falta de actuación inmediata y eficaz, la mayoría de los casos quedan impunes al paso del largo tiempo que toma llegar a las mujeres, a una sentencia firme.
Así que “el Poder Judicial del Estado de México no debe centrarse únicamente en el fortalecimiento de las tecnologías sino concentrar sus recursos técnicos, humanos y económicos en avanzar hacia una verdadera justicia pronta y expedita logrando así reivindicar los derechos de las mujeres y niñas; se debe avanzar en términos de eficacia y resultado en periodos definidos”, puntualizó.