Este día, el gobierno inauguró una fase del Tren Interurbano México-Toluca, ahora llamado «El Insurgente». Este tramo conecta Lerma con Santa Fe, en la Ciudad de México, y forma parte de un proyecto que comenzó en 2014 durante el sexenio de Enrique Peña Nieto. Sin embargo, a pesar de la apertura parcial, la obra no está terminada, y las estaciones Vasco de Quiroga y Observatorio siguen en construcción.
Proyecto incompleto y con aumento de costos
Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador había prometido finalizar el tren durante su administración, el proyecto se ha retrasado y no estará completo hasta finales de 2025.
Originalmente, la obra tenía un presupuesto de 38 mil millones de pesos, pero ahora aumentó a 116 mil millones. Este incremento refleja los desafíos financieros y técnicos que han afectado la construcción.
Estaciones en operación y tarifas
El tren ya opera con varias estaciones, aunque no todas están listas para el público:
– Zinacantepec
– Pino Suárez
– Tecnológico
– Lerma
– Santa Fe
Las tarifas varían según el tramo recorrido. Viajar desde Zinacantepec hasta Observatorio costará 100 pesos, mientras que otras rutas, como Toluca a Santa Fe, tendrán un costo de 80 pesos.
A pesar de que las estaciones finales aún no están en funcionamiento, el tren busca mejorar la conectividad entre el Estado de México y la Ciudad de México.
Capacidad y funcionamiento
El tren tiene la capacidad de transportar hasta 270 mil pasajeros al día, con un tiempo estimado de 39 minutos para recorrer toda la ruta cuando esté completa. Sin embargo, las limitaciones actuales impiden que el tren opere a su máxima capacidad.
Conclusión
El Tren El Insurgente sigue siendo una obra pendiente. Aunque se ha inaugurado una parte del proyecto, las promesas de un transporte eficiente y rápido aún están por cumplirse. La próxima administración del gobierno federal, liderada por Claudia Sheinbaum, deberá enfrentar los retos restantes para completar esta infraestructura clave.