El Estado de México ha registrado un avance significativo en la reducción de feminicidios y homicidios dolosos contra mujeres. Sin embargo, este descenso contrasta con el aumento de otros delitos relacionados con la violencia de género en la entidad, como el secuestro y la violencia familiar.
De acuerdo con el informe más reciente del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), hasta el 31 de julio, el Estado de México salió, por primera vez en cinco años, de la lista de los 30 municipios con más feminicidios a nivel nacional, con la excepción de Chalco, que se ubicó en el lugar 13 con cinco casos.
A pesar de este avance, la entidad mexiquense sigue ocupando el segundo lugar en incidencia de feminicidios a nivel nacional, con 38 casos, solo superada por Nuevo León, que encabeza la lista con 44.
En comparación con el mismo periodo del año anterior, el Estado de México reportó una disminución del 30.9% en feminicidios, pasando de 55 casos en los primeros siete meses de 2023 a 38 en 2024. En cuanto a homicidios dolosos contra mujeres, se registró una baja del 30.3 por ciento, con 131 casos en 2024 frente a los 188 reportados en 2023.
Sin embargo, mientras estos crímenes graves han mostrado una tendencia descendente, otros tipos de violencia contra las mujeres han aumentado en la entidad. El secuestro, la violencia familiar y la violencia de género en todas sus modalidades, exceptuando la violencia familiar, mostraron incrementos durante el mismo periodo.
La violación, aunque disminuyó en 266 casos, sigue siendo alta en el Estado de México, que encabeza la lista de incidencia de este delito a nivel nacional.
Este panorama revela un contexto complejo en el que, aunque se ha logrado una reducción significativa en los feminicidios y homicidios dolosos, la violencia de género en sus diversas formas sigue representando un desafío para las autoridades y la sociedad mexiquense.