En 2024, el Estado de México registró una disminución del 4.65 por ciento en la incidencia delictiva, pasando de 385,000 delitos en 2023 a 367,922 en 2024. Esta reducción, que representa 17,931 delitos menos, es la más significativa desde la creación de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.
Delitos de alto impacto: homicidio y secuestro a la baja
Entre los delitos de alto impacto, el homicidio doloso mostró una disminución del 13.05 por ciento, con 339 víctimas menos en comparación con 2023.
De hecho, noviembre de 2024 se destacó como el mes con la incidencia más baja de homicidios desde enero de 2017, con solo 130 eventos registrados.
El secuestro, por su parte, continuó su tendencia descendente por quinto año consecutivo. En 2024, se redujo un 26.09 por ciento, pasando de 69 casos en 2023 a 51.
Otras caídas en la criminalidad
La extorsión también mostró una disminución del 14.24 por ciento, con 571 casos menos que en el año anterior.
A pesar de estos avances, persisten desafíos significativos en la lucha contra la criminalidad. La trata de personas, en particular la explotación sexual, sigue siendo una problemática en la entidad.
Desafíos persistentes en seguridad y justicia
Informes de diversas organizaciones señalan que las autoridades no han respondido de manera efectiva a la trata de personas. La falta de coordinación y los casos de corrupción han obstaculizado el progreso en la resolución de estos crímenes.
Aunque se reporta una disminución en algunos delitos, la percepción de inseguridad entre la población sigue siendo alta, lo que refleja una desconexión entre las estadísticas oficiales y las experiencias cotidianas de los habitantes del Estado de México.
Contexto nacional: un panorama preocupante
A nivel nacional, México ha atravesado uno de sus periodos más violentos. Desde 2018, se han registrado más de 30,000 homicidios intencionales anuales. Aunque las cifras han disminuido desde 2020, los números siguen siendo alarmantes.
Conclusión: avances y retos pendientes
Los datos presentados por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México en 2024 indican un descenso en la incidencia delictiva. Sin embargo, los persistentes desafíos, como la percepción de inseguridad y la trata de personas, subrayan la necesidad de continuar fortaleciendo las estrategias de seguridad y justicia en la región.