Tras acreditar errores, el Consejo de la Judicatura del Estado de México ordenó reponer el proceso que enfrenta la familia del menor Carlos Eduardo, lo que implica que se girará una nueva orden de aprensión contra Erick “N” presunto involucrado en el secuestro y asesinato del menor, y quien fue puesto en libertad el 9 de octubre de 2019.
El 14 de febrero de 2013, el joven de 15 años fue secuestrado a las puertas del colegio Montessori, que se ubica en la calle Mariano Matamoros 505 Sur, en la colonia Francisco Murguía en Toluca.
Este martes, se llevó a cabo la audiencia de apelación contra la resolución de la jueza María Alejandro Carrillo García, quien dictó libertad a Erick Rojas Lina, pese a diversas pruebas presentadas por la parte acusadora, como el hecho de que el secuestro tuvo como sede la casa de la madre de éste, con domicilio en San Mateo Atenco
Previo a la audiencia, Alfredo Martínez Gutiérrez, padre del menor, advirtió que hubo corrupción tanto del Ministerio Público de Carrillo García, “de otra forma no se explica todo lo que pasó. Este sujeto estuvo prófugo cinco años. Después de dos años de haber sido aprehendido, la jueza lo absolvió aun cuando las otras cuatro personas inculpadas refieren que este sujeto fue quien cometió atrocidades”.
“Él fue quien lo levantó, tomó de los tobillos para arrojarlo de lo alto del Puente Calderón. El niño permaneció un día y dos noches hasta que un campesino pasó y vio el cuerpo, lo llevaron para Tenancingo donde permaneció seis meses, pues confundieron sus señas particulares con otro joven. Ha sido un camino muy difícil para nosotros”, relató.
A siete años del homicidio de su hijo, Don Alfredo quien está postrado a una silla de ruedas, recordó que Beatriz Alejandra «M» – quien laboraba en una joyería y seguido acudía al local de Tortas que tenía Don Alfredo-, fue quien planeó el secuestro del joven.
Por el secuestro y homicidio de Carlos Eduardo permanecen en la cárcel de Almoloya de Juárez Beatriz Alejandra y sus cómplices Margarito «V», Emilio «R» y Silverio «R», quienes recibieron una sentencias de 53 años de prisión, en marzo del 2016.